Kawasaki Zephyr 750 Cafe Racer
Dentro de las numerosas bases existentes tanto nuevas como de segunda mano, la Kawasaki Zephyr 750 es una muy buena opción para hacerte con una japonesa de cierta apariencia retro y suficiente potencia. Sin llegar a ser una auténtica clásica (en un futuro lo será) como las de la sierie KZ por ejemplo; te permite disfrutar de una tetracilíndrica robusta, fiable y con una línea ideal para customizar.
Este modelo está dentro del grupo de bichas que yo llamo como: «El trío de ases nipón». Un conjunto de tres motos que «no son tan viejas», que cuentan con un buen motor y además tienen un chasis y un diseño general muy procafetero. Se trata de la Honda CB750 Seven Fifty, Kawasaki Zephyr 750 y Suzuki Inazuma 750. Ambas de características similares, y que ahora vas a ver una joya de Kawasaki Zephyr 750 Cafe Racer hecha por el constructor Ton-Up Garage de Portugal.
Dentro de los cambios que se han realizado, pueden apreciarse:
- Llantas de radios con aros pintados en negro brillo, más radios y bujes en inox.
- Botellas de horquilla y tijas pintadas en negro mate.
- Faro delantero redondo con lente amarilla y soportes a las barras.
- Intermitentes mini redondos ahumados.
- Guardabarros delantero reducido.
- Radiador pintado en negro mate.
- Frenos y discos cambiados.
- Semimanillares.
- Velocímetro cromado redondo.
- Tija superior alisada.
- Puños de rombos grises.
- Colectores y escapes en negro mate.
- Motor revisado y comprobado, pintado en gris con tapas laterales en negro brillo.
- Estriberas retrasadas.
- Colín artesanal hecho para adaptarse al subchasis, con piloto de freno integrado.
- Amortiguadores traseros restaurados.
- Cableado revisado.
- Tapas laterales artesanales.
- Asiento monoplaza tapizado en cuero gris con el sello del constructor.
- Chasis pintado en negro brillo.
- Depósito original pintado en negro brillo con unos diseños en los laterales que siguen la forma tipo lágrima.
- Filtros cónicos en carburadores.
Una transformación que presenta a esta Kawasaki Zephyr 750 Cafe Racer como una moto elegante con un cierto rollo ofrecido por las líneas pintadas en un amarillo dorado.
La verdad es que la base tiene mucho potencial y en buenas manos como ves, el resultado es brutal.
Dentro de mi «Trío de ases nipón» ¿Con qué bicha harías tú una Cafe Racer?