Honda CB750 Seven Fifty Cafe Racer – Bull Cafe Racer. Una moto que cuenta con un estilo que cada vez gana más seguidores. Buenas motos, música y chaquetas de cuero es lo que da vida a esta pasión. No es simplemente un tipo de motos, es una cultura es una forma de vida.
Krystian Bednarek, un miembro de la comunidad Cafe Racer, nos escribe desde Polonia para mostrarnos un trabajo y proyecto de construcción llamado Bull Cafe Racer, que ha iniciado y efectuado junto a su padre.
Por el día desarrollador y programador web. Por la noche, un motero que disfruta de la libertad rodando con su bonita moto.
La historia de Krystian puede que tenga mucho en común contigo. Y seguramente, con todos los miembros de la comunidad. El quería construir su moto desde cero. No quería que estuviese llena de plásticos, y prefería añadir a los cambios piezas de metal y cuero.
Es la primera moto que ha construido para él, por eso deseaba hacerlo todo lo mejor posible durante la preparación. Después de estar navegando por internet durante mucho tiempo y ver miles de ejemplos. Cada uno de ellos le ayudo a encontrar algunas inspiraciones y a desarrollar los elementos específicos para crear su propio diseño.
Gracias a esto creó la visión de la moto que quería en su cabeza. Pero a pesar de que estaba seguro de lo que soñaba construir, no fue capaz de sacar el proyecto en un papel. Por lo que decidió comenzar a trabajar directamente sobre la moto.
Para ello compró la base, una Honda CB 750 Seven Fifty del año 1992 en muy buen estado. Transportada a su garaje, no sabia muy bien cómo empezar. Cientos de piezas para quitar ¿Cómo iba a recordar todo para luego montar todo perfectamente? Es la primera moto que ha construido y todo era bastante nuevo para él.
Fuera preocupaciones, decidió desmontar pieza tras otra, escribiendo el nombre de cada una y apuntando en un papel donde se encontraba, la parte exacta de la moto y la forma de cómo la retiró. Gracias a eso, tenía toda la información de forma ordenada.
Para formar la U del subchasis correcta, dejó sin montar el chasis, el motor, las ruedas y la horquilla. Eso también le ayudo a formar el diseño que quería.
Siguiendo una planificación estricta, después de montar cada parte, pasaba a otra sin prisas. Así hasta acabar el proyecto. No tomó el camino más fácil y se centró incluso en los detalles más pequeños.
Todo ello le llevó unas 500 horas de duro trabajo.
En la lista de los cambios, Krystian ha detallado lo siguiente:
Asiento:
Fabricado a medida por la empresa ARMJ Sport. Se compone de dos materiales de relleno, en la parte inferior con una estructura dura y en la parte superior con una estructura suave. Se terminó con tapicería de cuero marrón de la más alta calidad.
Manillar:
Semimanillares realizados en un tubo de acero con una fijación hecha en aluminio de diámetro 41 mm. El conjunto se pulió por completo.
Guardabarros:
Hechos a mano a partir de una lámina con un espesor de 2 mm. El guardabarros trasero se monta en el basculante. Arenados y pintados con pintura en polvo y al horno.
Tubos de escape:
Colectores encintados con cinta anticalórica color titanio y colas de escape cromadas de 44 cm tipo megáfono.
Soportes de los faros:
Realizados a mano en acero inoxidable. Chorreados con arena y pintura en polvo al horno. Contienen agujeros roscados, para montar los intermitentes.
Motor:
Es el original de la Honda CB 750 Seven Fifty. Kit de juntas cambiado, revisado y limpiado profundamente.
Chasis:
Modificado el subchasis, dejándolo más corto y redondeado, con una nueva parte trasera en forma de U. Aparte de esto también se ha añadido la plataforma sobre la que se coloca toda la parte eléctrica. Todo está arenado y pintado con polvo.
Faro:
El original pintado de negro con la lente pulido.
Luz de freno:
Caja de la lámpara hecha en metal y cromada. Incluye la luz de matrícula.
Caja de batería:
La caja de la batería fue hecha a mano en acero inoxidable y unida al basculante. En la parte inferior de la caja y la cubierta se montó un material de amortiguación antivibración.
Retrovisores:
Espejos redondos de metal cromados y unidos a los extremos de los puños.
Intermitentes:
Señales de giro de metal y cromadas. Quedando los indicadores de dirección traseros directamente en el bastidor, y los delanteros colocados en el soporte del faro.
Velocímetro y tacómetro:
De tamaño reducido, cromados y de estilo años 60. El velocímetro cuenta con cuatro testigo LED, que marcan el neutral, indicador de aceite, luces e intermitentes.
Depósito:
Tanque original modificado sin los anclajes de las tapas laterales y pintado en polvo.
Llantas y horquilla:
Llantas arenadas y pintadas en polvo. Horquilla original con las botellas pulidas.
Puños calefactables:
Los puños estándar transformados a puños calefactables. El controlador de calentamiento en dos etapas se ha montado debajo del asiento.
Tapa de combustible:
El tapón del depósito original ha sido pulido.
Filtros de aire:
Los filtros de aire cónicos con un diámetro de 52 mm a medida, construidos por la compañía de Proton Filters.
Emblemas:
Realizados con el logo del constructor, se han colocado a ambos lados del tanque y cubiertos con un barniz incoloro.
Otros:
Soporte del velocímetro y tacómetro hecho a mano en acero inoxidable. Palanca de embrague y de freno pulidas.
Después de esperar durante tanto tiempo, fue una sensación increíble ver lo que había creado, probar la moto y sobre todo, disfrutar con ella.
Todo se hizo tal cual lo imaginó en su mente. En ocasiones resultó difícil, pero toda la experiencia vivida valió la pena. Gracias a todos estos esfuerzos ahora tiene una moto 100% a su gusto.
Muchas gracias Krystian por compartir con nosotros tu trabajo y proyecto.
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Lo único que puedo decir: UN APLAUSO PARA EL POLACO!!!!!!!!!!!!!!!!