Suzuki GSXR 1100 Cafe Racer

¿Es posible esto? Pues sí. Muchos miembros de la comunidad, incluso tú mismo que estás leyendo ahora este post, puede que te hayas preguntado en alguna ocasión si se puede cafetear una «R» o moto deportiva. Como siempre digo, con creatividad, pasión y buenas manos, se puede hacer una cafetera guapa con casi cualquier base. Y esta Suzuki GSXR 1100 Cafe Racer es la prueba de ello.

Dino Maltoni de Dino Cycles, vuelve desde Mendoza a Cafe Racer Pasión para mostrarte su nuevo trabajo. Una moto con mucho carácter, con la que su propietario Gustavo Guerra quería obtener una renovación de su Suzu GSXR 1100 de 1992, además de poder disfrutar de un diseño deportivo y de estilo cafetero.

Esta burra digna de admirar y que tiene que ser toda una delicia verla en persona, ha sido modificada centrándose en todos los detalles posibles y permitidos en el presupuesto. Ya que aunque cuando Dino recibió la moto base, esta se encontraba en perfectas condiciones; el constructor argentino decidió desmontarla por completo e iniciar la customización pieza a pieza. No solo la estética ha sido cambiada, todas las partes mecánicas y funcionales han sido revisadas y mejoradas para trabajar de forma óptima.

Hecha a medida para Gustavo, que como cualquier motero quería que su japonesa tuviese un rollo brutal. Dino diseñó, construyó y monto en esta Suzuki GSXR 1100 Cafe Racer:

• Un nuevo subchasis con el estilo requerido y adaptado al piloto.
• Un nuevo colín fabricado en fibra desde un molde de arcilla artesanal.
• Asiento monoplaza.
• Soporte para el faro y «careta» o frontal hechos a mano.
• Escapes handmade fabricados en acero inoxidable junto a Diego Ferreira.
• Rodamientos Torrington.
• Discos de frenos ventilados floreados.
• Estriberas retrasadas.
• Filtro de aire ovalado.
• Semimanillares.
• Caja para batería y componentes bajo el asiento.
• Espejos retrovisores a final de puño.
• Lente de faro amarilla.
• Piloto de freno LED.
• Portamatrícula mínimo y artesanal.
• Guardabarros delantero super reducido.
• Puños de aluminio.
• Llantas con «garganta pulida».
• Pintura completa estilo Martini Team.

Como ves, una Suzuki GSXR 1100 Cafe Racer de muy buena potencia y con un diseño muy guapo lista para utilizar día a día. Tiene que ser toda una gozada exprimir el acelerador y experimentar no solo un sonido majestuoso sino una experiencia de conducción merecedora de una moto deportiva.

Muchas gracias a Mariano Carazo por la info, a Franco Martínez por las fotos y a Dino por un fabuloso trabajo ¡GAS!

¿Con qué base te harías una R Cafe Racer?